Hoy en día, las cintas transportadoras son muy comunes en cualquier proyecto de construcción. Pero esta herramienta no siempre ha sido tal y como la conocemos. Vamos a ver un breve resumen de la historia de las cintas transportadoras.
Historia de las cintas transportadoras
Las primeras cintas transportadoras de las que se tienen datos datan del siglo XVIII, más concretamente del año 1795.
De madera y cuero
Estas primeras cintas transportadoras eran una especie de cinturones de cuero que corrían sobre camas de madera. Eran bastante cortos y funcionaban con manivelas.
Se usaban principalmente para transportar mercancías a los barcos.
Energía a vapor
Cuando nació la primera cinta transportadora ya existía la máquina a vapor, por lo que rápidamente se produjo una evolución.
La primera cinta de vapor surgió en 1804, gracias a la Armada Británica.
La Revolución Industrial
Si por algo destaca el principio del siglo XX es por los grandes avances en la tecnología del transporte.
En estos años ya aparecen las primeras cintas de acero, así como las primeras cintas transportadoras subterráneas.
En 1901 se otorgó la primera patente de cintas transportadoras, lo que permitió el transporte de mercancías con rodamientos internos de bolas.
La aparición de Henry Ford
Influenciado por el funcionamiento de los mataderos, implementó las primeras líneas de montaje para coches, lo que permitía mover el coche a lo largo de una cinta, lo que agilizaba el trabajo.
Nuevos materiales
Según pasaba el tiempo, las cintas transportadoras se fueron desarrollando. Gracias a nuevos materiales se consiguió que las cintas transportadoras fuesen más y más eficientes.
En los años 50 se añadió una torsión en la correa que posibilitó la prolongación de la vida útil de la cinta.
Hoy en día contamos con cintas transportadoras de gran calidad, que nos facilitan el trabajo en distintos proyectos de construcción, así como en otros sectores.
